Historia del Gyr

«Don Teófilo de Godoy: En 1898, que viajó 20 días a caballo y luego tomar el ferrocarril hasta Rio de Janeiro, esperar 2 meses en Río para posteriormente trasladarse en barco hasta París y de allí trasladarse hasta la India. Después de estar revisando ganado durante 1 año, volver a Brasil con 15 Cebúes, es toda una odisea.

1956, Paulo Roberto fue a la India para comprar Cebú para el criador Joaquim Borges, el gobierno brasileño sabiendo de esa importación ordeno matar los animales en cuanto arribaran a Brasil. Donde para evitar la muerte del ganado astutamente viajan por el Río Paraguay y llegan a Bolivia. Donde poco a poco con un avión privado Joaquim Borges traslado los animales a Brasil.

1958, Celso García Cid le encarga a Hidelfonso que visite la India y busque en cada región el mejor ganado Gyr, y llega a la región de Jasdan, pertenecientes al Maharajá de Bhavnagar con 500 años de selección, el Maharajá deseaba conocer a Celso García Cid, por lo cual el viaja a la India personalmente el 21 de Noviembre 1958, aprovechando para tomas registros fotográficos y de video de los animales cebúes encontrados a su paso. Dos años después de adquirir 119 animales estos se preparan para embarcar en enero de 1960, después de 44 dias en barco llegan a la Guayana Francesa, donde después fueron 5 meses de cuarentena en la Isla de La Mere en las peores condiciones, con poco alimento para el ganado por lo cual fallecieron 17 animales, pero ni Celso ni sus amigos se desanimaron. Finalmente desembarcan en la Isla de la Cobra, Paranaguá, para otra cuarentena de 5 meses, donde finalmente en Diciembre de 1960, el ganado llega a la Hacienda Cachoeira.

Don Celso viaja nuevamente a la India en 1962, el ganado que compra Celso, después de 60 días en cuarentena en la India, se transporta en barco desde Bombai hasta la Isla de de Fernando de Noroña, en Noviembre de 1962 después de 45 días de viaje, los 120 animales desembarcan en la Isla para la cuarentena de 8 meses. En Julio de 1963 después de la cuarentena en la Isla, el ganado se prepara para entrar a territorio Brasileño.

El Gyr es amistad, por lo cual en 1965 el hijo del Maharajá de Bhavnagar escribe una carta a Celso García Cíd, donándole todo su rebaño de ganado, como era la voluntad de su fallecido padre, debido al respeto y admiración.

Por esto y más yo amo el Gyr. HCG»

Escrito por HGC

Obtenido de: Facebook.com/gyrmexicano